En estas fotografías, podemos ver el Programa de Fiestas de la BUFA DE ALDEADÁVILA, organizado por el Ayuntamiento de esta villa, y que ha contado con la colaboración de muchas personas...entre ellas el nuevo cura, Jesús Alberto, quien ya nos ha explicado que quiere recuperar antiguas tradiciones de este pueblo, y el papel que la Iglesia tiene en éstas. También la imagen del periodista Javier Pérez que va a oficiar de pregonero con su habitual apasionamiento por este tipo de cuestiones. Y la tercera foto, en blanco y negro de los primeros años 50 podemos ver en la Calle del Rollo a un grupo de jóvenes sosteniendo una cuerda, que se amarraba entre ambos lados de la calle. En la cuerda se colgaban diferentes tinajas de barro con los regalos o sorpresas más sorprendentes: pollo, pavos, otros regalos...y alguna de ellas tenía ceniza...O AGUA.
Los jóvenes de entonces, hoy sabios mayores, se divertían de lo lindo con sombreros, y lo más animado de aquellos momentos. Otros jóvenes montados en mulos, o burritos corrían por la calle para tratar de romper los cántaros de barro y ver qué sorpresa les tocaba. Es el juego de la cuerda o "LA CARRERA DEL GALLO". El momento de mayor emoción y risas era cuando se rompía el cántaro de agua, con el consiguiente chapuzón y risas de todo el personal. La paja también era otro elemento importante en la fiesta, y los espectadores arrojaban paja a los jóvenes según pasaban a su lado...
No está en esta programación inicial de LA BUFA, pero todo se andará... Este juego se hacía el domingo por la tarde.
Por la noche, los jóvenes siempre dispuestos a pasárselo en grande, en una tierra que hacía de estas sencillas fiestas un auténtico momento grande del año, se dedicaban con cencerros, con botellas y con paja a recorrer el pueblo, y circundarlo por sus parte exterior, vestidos con sombreros y trajes originales, y siempre dispuestos a meter mucho, mucho ruido.
Después de unos años 50, 60, 70, 80...de un modernismo extraño, y un desarrollismo que se basaba en utilizar la pala excavadora y derrumbar tantas y tantas bonitas historias...parece que nos estamos reponiendo de tanta indigestión; 50 años nos ha costado. Quedan pocas personas que recuerdan estos bellos momentos, al igual que en nuestros pueblos, pero no se han olvidado completamente...Ahora nos dejan el testigo a todas nosotras, a recoger un cencerro, y en grupo a "meter bulla": no importa la edad, se trata de divertirse.
Daniel Sagredo, etnólogo y amante de esta tierra nos ha dejado un estudio detallado y concienzudo de las raíces de esta Bufa Popular, de cómo está entroncada en el alma de nuestros pueblos desde Verín, a Zamora y Tras-Os-Montes (os pondré alguna fotografía de la "Festa dos Vellos" de Bruçó), pero el mensaje más importante que nos traslada Daniel, no sólo es nuestro deber de recuperar estas fiestas, sino de adaptarla a los tiempos actuales: una fiesta no pierde su sentido porque en lugar de regalar un pollo o un pavo se cuelgue en la cuerda otro objeto más actual: los tiempos evolucionan, pero el alma de un pueblo sigue viva, sin ella no hay pueblo.
¡A divertirse!. ¡VIVA LA BUFA! ¡VIVA SAN ANTÓN!
Os dejo aquí el enlace con la revista "EMOCIONES" publicada por La Salina de la Diputación de Salamanca, que habla de nuestras fiestas: http://www.dipsanet.es/turismo/emociones/emociones9/noticia5.php
Detalle de los PENDINGONES EN CORPORARIO. Cortesía: Manolo y Oficina de Turismo Y Recepción de Visitantes de ALDEADÁVILA.
Detalle bufante 2010: con la cara tiznada y tratando de espantar los malos espíritus: en pleno acto de exorcizamiento