Continuamos publicando sobre nuestro amigo y novelista Jesús Alejo Guarde: en su obra siempre late el corazón de nuestra Tierra, las Arribes del Duero, las aguas y cortinas sobre las bravas aguas de nuestro río, los cachones, el paisanaje, sus costumbres y su habla tan propia, tan unida a sus peñas.
Manantial que brotas
entre agrietadas rocas.
Nacimiento de aguas cristalinas
que presurosas,
descienden por las colinas,
sorteando cuencas caprichosas.
Manantial,
que al alma le otorgas sal
y a los seres nutres la vida.
Sacias paladares sedientos
y confortas al que anida.
Alumbramientos a borbotones
que rellenan profusos cauces,
bendicen cultivos y embriones
y sustentan viñas, almendros y sauces.
Nadie imagina estos parajes.
Repletos de pequeñas cortinas,
que entrecortan la ladera,
engalanando la ribera,
con olivos y plantaciones frondosas.
Jesús Alejo Guarde
24 enero 2015
Jesús Alejo Guarde- Aldeadávila, SALAMANCA 1957- es un escritor que domina el relato corto, la cercanía con el personaje y su existencia vital. Siempre interesado en los temas de su tierra: LAS ARRIBES DE SALAMANCA.
Manantial que brotas
entre agrietadas rocas.
Nacimiento de aguas cristalinas
que presurosas,
descienden por las colinas,
sorteando cuencas caprichosas.
Manantial,
que al alma le otorgas sal
y a los seres nutres la vida.
Sacias paladares sedientos
y confortas al que anida.
Alumbramientos a borbotones
que rellenan profusos cauces,
bendicen cultivos y embriones
y sustentan viñas, almendros y sauces.
Nadie imagina estos parajes.
Repletos de pequeñas cortinas,
que entrecortan la ladera,
engalanando la ribera,
con olivos y plantaciones frondosas.
Jesús Alejo Guarde
24 enero 2015
Jesús Alejo Guarde- Aldeadávila, SALAMANCA 1957- es un escritor que domina el relato corto, la cercanía con el personaje y su existencia vital. Siempre interesado en los temas de su tierra: LAS ARRIBES DE SALAMANCA.
Topógrafo y empresario de la construcción, comienza su andadura literaria en 1992 con diversas publicaciones y numerosos artículos en la prensa de su Salamanca natal, también con notables poesías como la dedicada al río Duero.
Su primera publicación: “Aldeadávila de la Ribera: de mi tierra prendado” hace una interesante incursión en las tradiciones y vocabulario de su peculiar Habla; pero es en sus relatos cortos, publicados a partir de 2007, donde se aprecia el dominio de la escena y de la evolución personal de los personajes, donde les dota de una vida muy especial que sólo se puede desprender de los Cachones y Arribes de esta comarca tan peculiar y distinta.
Obras como “Flash de una vida”, “La avispa” reciben diferentes premios literarios, como el entregado por Almudena Grandes en 2009, y le consagran definitivamente como escritor.
Ahora, en 2011, con su primera novela “La Fábrica de la Luz” consagra definitivamente a su tierra, y a la memoria del Salto de Aldeadávila como objetos literarios.