Cine en las Arribes del Duero

Cine en las Arribes del Duero
Doctor Zhivago, La Cabina, Del Pirineo al Duero...

Mapa de La Ribera del Duero en 1641, durante la invasión portuguesa

Cascada del Remolino. ARRIBES DEL DUERO

lunes, 9 de noviembre de 2015

Desastres y pestes en la cuenca del Duero

Inundaciones y pestes en la cuenca del Duero durante el s.XV. 
La Historia diferente de las Arribes del Duero, parte 117.
Este siglo XV es bien conocido por tener unas fuentes históricas numerosas. Comienza con la peste del 1400. Esta peste fue tan mortífera, que las Cortes de ese año, celebradas en Cantalapiedra, permitieron a las viudas contraer matrimonio en el primer año de la viudez.
De las grandes lluvias del 1402-1403, no cabe inferir noticia cierta, pero sí en Valladolid, pues por privilegio de febrero de 1405 dado por Enrique III, se hacía merced para reparo de la cerca y el puente.
En el 1414 se recrudece la peste en Salamanca debido a la sequía. En 1418 se produce una falta de pan que dura tres o cuatro años. En 1422, riada en Salamanca, con daños en el Convento de los Monjes Benitos.
En 1433 nevó durante cuarenta días seguidos, especialmente en febrero. Por la Crónica del Halconero sabemos que fueron nevadas realmente extraordinarias. De 1433-1435 son “aquellas increíbles fortunas de aguas y nieves que duraron desde el 17 de octubre al 7 de enero” (serían pues 81 días). La “Crónica de Juan II” dice:
"En todos estos días nunca cesó agua o nieves”
Puig cita a Barrantes, que da como período de lluvias en Castilla desde Todos los Santos hasta el 25 de marzo, con grandes destrozos, especialmente en la Tierra de Campos. Un hambre general se siguió por haberse perdido las cosechas a consecuencia del exceso de agua. Conocemos también de los destrozos en este año en Valladolid y Medina del Campo, porque obligaron a Juan II a abandonar las obras de canalización del Zapardiel.
En 1443 hubo mucha hambre.
La ermita del Castillo en Pereña de la Ribera, lugar simbólico y de romerías como Laverde en Aldeadávila de la Ribera, ambos besando las aguas del DUERO.